Núremberg (Nürnberg en alemán) es la segunda ciudad más grande de Baviera, en el sur de Alemania, a tan sólo una hora en tren de Múnich, la capital y ciudad más grande de ese estado.
Es conocida por su hermosa arquitectura medieval, su importancia histórica y su papel durante la Segunda Guerra Mundial.
Durante la Edad Media, Núremberg fue una Ciudad Imperial Libre, es decir, una ciudad autónoma sometida únicamente al control del Emperador.
Aquí aquí se llevaban a cabo las llamadas Dietas Imperiales (asambleas de los príncipes laicos y eclesiásticos del Sacro Imperio Romano Germánico). En 1356, la Bula de Oro promulgada por el emperador Carlos IV dispuso que todo rey alemán recién elegido debía celebrar su primera Dieta Imperial en Núremberg.
Además, hay que recordar que fue sede oficial de congresos del Partido Nazi, centro destacado del antisemitismo y de la persecución racista durante el Tercer Reich.
Fue aquí, precisamente, donde se firmaron las Leyes de Núremberg que en 1935 eliminarían definitivamente a los judíos de la comunidad estatal.
Todo esto hizo que más del 90% de su territorio fuese bombardeado y destruido durante la Segunda Guerra Mundial, pero afortunadamente, Núremberg resurgió de sus cenizas y supo reconstruirse como era antes.
Además, varios años después, se llevarían a cabo los Juicios de Núremberg para juzgar a los principales criminales de guerra alemanes de la Segunda Guerra Mundial.
Pero Núremberg no es sólo eso, es también cuna de artistas como Alberto Durero o Hans Sachs, entre otros.
Hoy en día sigue atrayendo a multitud de personas, especialmente cuando llega diciembre ya que su mercadillo de Navidad (Christkindlesmarkt) que empezó a funcionar en el siglo XVII, es el más antiguo de toda Alemania.
Además, en esta bonita ciudad bañada por el río Pegnitz goza de una gran gastronomía. En ella podrás saborear las típicas Lebkuchen (unas galletas de especias típicas de la ciudad) o sus salchichas pequeñas asadas acompañadas de una buena cerveza o glüwein.
¿QUÉ VER Y HACER EN NÚREMBERG?
1. HACER UNA VISITA GUIADA.
A nosotros siempre nos gusta hacer un tour guiado el primer día para hacernos una idea de la ciudad y conocer un poco de su historia. Una buena opción es este free tour.
2. RECORRER EL CASCO ANTIGUO O ALTSTADT.
El casco antiguo de Núremberg es un laberinto de calles adoquinadas con edificios históricos bien conservados. La plaza principal, Hauptmarkt, es el corazón de la ciudad y alberga el Mercado de Navidad más famoso de Alemania.
3. BUSCAR EL ANILLO DORADO EN LA SCHÖNE BRUNNEN
Según cuenta la leyenda, si giras el anillo dorado de la Fuente Bonita que se encuentra en la Hauptmarkt una vez, se te concederán tres deseos, pero, si lo giras tres veces, tendrás hijos.
Esta fuente de forma piramidal simboliza la visión teocéntrica del mundo en la Edad Media. En ella están representadas la filosofía y las siete artes liberales, los cuatro evangelistas, los siete electores con derecho a ser elegidos emperadores , nueve héroes de la historia mundial y Moisés con siete profetas.
Esta fuente también sobrevivió a los bombardeos gracias a una protección que se construyó a su alrededor.
Pero la piedra arenisca de la fuente original se fue dañando a lo largo del tiempo y hoy en día la fuente de la plaza es una réplica construida a principios del siglo XX en piedra caliza. La original fue restaurada y se encuentra en el Museo Germánico.
4. CONTEMPLAR LA FRAUENKIRCHE
La Frauenkirche o iglesia de Nuestra Señora es una de las tres más importantes de Núremberg.
En esta iglesia de estilo gótico destaca su balcón desde el que cada año el «ángel de la ciudad» inaugura su mercadillo navideño y también su reloj mecánico con carillón, donde cada día a las 12 de la mañana, los siete electores con derecho a elegir emperador rinden homenaje a Carlos IV.
¿Sabías que el carillón salvó de la bancarrota a la ciudad de Núremberg?
Entre 1506-1509 el maestro cerrajero Jorg Heuss y el herrero Sebastian Lindenast, construyeron el reloj. El trabajo fue diseñado y construido por Heuss, mientras que Lindenast suministró las figuras de cobre.
Pero, en 1823 la ciudad tenía grandes dificultades económicas, por este motivo el Consejo decidió vender las piezas por el costo del metal y reemplazarlas por piezas de madera. Sólo el Emperador y los trompeteros se salvaron de ser vendidos, por tanto son las únicas piezas originales de 1509.
5. SUBIR HASTA EL CASTILLO DE NÚREMBERG
Esta imponente fortaleza medieval, ubicada estratégicamente en lo alto de una colina, domina el horizonte de la ciudad.
Sus orígenes se remontan al siglo XI, pero, a lo largo de los siglos, ha sido ampliado y modificado, sirviendo como residencia de emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico.
En él destacan varias estructuras, como la Torre de la Doble Capilla Imperial, el Pozo Profundo y la Torre Sinwell, o torre redonda a la que se puede subir para disfrutar dd las mejores vistas de la ciudad.
Además, alberga varios museos que muestran la historia y la cultura de la región. El Museo del Castillo (Burgmuseum) presenta exposiciones sobre la historia del castillo y la ciudad.
Aunque, a ojos de la mayoría de turistas que visitan Núremberg, una de las cosas que más destacan de este edificio son las impresionantes vistas panorámicas que ofrece tanto de la ciudad de Núremberg como de sus alrededores.
Los jardines del castillo ofrecen un lugar tranquilo para pasear y disfrutar de la naturaleza. También brindan una oportunidad para admirar la arquitectura del castillo desde diferentes ángulos. Aunque hay que tener en cuenta que de noviembre a marzo están cerrados.
En ocasiones, el Castillo de Núremberg es el escenario de eventos culturales y conciertos al aire libre, aprovechando su atmosférica ubicación.
Y, como todo buen castillo que se precie, una de las partes más intrigantes es su antigua prisión en la que podrás visitar las mazmorras y celdas para apreciar un poco más de cerca su historia.
Puedes llegar al Castillo de Núremberg a pie subiendo por las empinadas calles empedradas o tomar el funicular que conecta la ciudad con el castillo.
ENTRADA
Horario de apertura: abril a septiembre de 9 a 18 h; octubre a marzo de 10 a 16 h
Precio: 7€ general; 6€ reducida
www.kaiserburg-nuernberg.de
6. CRUZAR LOS PUENTES DE NÜREMBERG
Núremberg se construyó en torno al río Pegnitz. Hay quien dice que si no has atravesado sus puentes, no has estado en la ciudad.
Algunos de ellos han sobrevivido a guerras e inundaciones o han sido reconstruidos, pero sin duda alguna son uno de los puntos más fotogénicos de la ciudad, como el puente del Verdugo.
Los puentes son tan importantes que hay hasta una ruta guiada por los puentes de Núremberg en la que puedes conocer tanto su historia como curiosas leyendas sobre estos viaductos.
7. FOTOGRAFIAR EL PUENTE DEL VERDUGO
Como ya hemos dicho, el puente más pintoresco es el Puente del Verdugo. Fue construido en 1457 como pasarela de madera que comunicaba también con la pequeña isla de isla de Trödelmarkt.
Sufrió muchos daños por inundaciones y en 1595 fue arrastrado río abajo junto con varias personas que se encontraban en él.
Fue reconstruido en el siglo XVII, sustituyendo además parte de la muralla, que también había quedado muy dañada con las inundaciones.
Pero durante la Segunda Guerra Mundial volvió a sufrir muchos daños. Afortunadamente, lo volvieron a reconstruir tal y como lo vemos hoy en día, como puente de madera con tejado, un diseño tan original que lo convierte en el puente más fotografiado de Nuremberg.
Pero si quieres sacar su mejor perfil, deberás hacerlo desde el puente más antiguo de la ciudad, el Puente de Max o Maxbrücke.
8. CRUZA EL PUENTE COLGANTE DE HIERRO MÁS ANTIGUO DE EUROPA
Entre la antigua muralla y el Puente de Max, queda el Kettensteg, el puente colgante de hierro más antiguo de la Europa Continental. Mide 68 metros y data de mediados del siglo XIX, todo un hito en la ciudad.
Mucha gente lo conoce como el puente de las cadenas, debido a los eslabones de cadena de unos tres metros de largo a los que está unido.
9. PASEAR POR LA WEIßGERBERGASSE
justo al otro lado del puente colgante, en dirección al castillo, se encuentra la fotogénica Weißgerbergasse.
En esta romántica calle podemos se pueden ver las típicas casas de los artesanos. Unos 20 edificios históricos edificios de piedra y madera entramada, que dan testimonio de la prosperidad que trajo consigo la artesanía del cuero.
Lo más curioso de estas viviendas es que sobrevivieron ilesas a la Segunda Guerra Mundial. Hoy en día se pueden ver restauradas. Muchas de ellas están adornadas con diferentes colores, voladizos y miradores pintorescos y alegres.
Aunque, en lugar de los ajetreados curtidores de pieles de la Edad Media, en la actualidad, la Weißgerbergasse está animada por cafeterías, bares, pequeñas tiendas y algún que otro taller artesanal.
10. CONOCE LA IGLESIA DE SAN SEBALDO
Al final de la Weißgerbergasse, se encuentra la iglesia de San Sebaldo, un imponente templo de estilo románico tardío con torres góticas constuido sobre una antigua iglesia.
Como curiosidad, debes saber que aquí se conservan las reliquias del patrón de la ciudad: San Sebaldo, un santo católico en una iglesia evangélica luterana.
11. VISITA LA CASA DE ALBERTO DURERO
En Núremberg se encuentra la casa donde vivió y trabajó el famoso artista renacentista Albrecht Dürer o Alberto Durero, como lo conocemos en España.
Ahora es un museo dedicado a su vida y obra. Está ubicada en la plaza Tiergärtnertor, un popular destino turístico y uno de los puntos de encuentro de la gente local, en el casco antiguo de Sebalder, uno de los dos barrios del centro histórico.
Allí se encuentra la misma Tiergärtnertor, puerta y parte de la muralla de la ciudad. Como curiosidad, debes saber que es uno de los pocos edificios de la ciudad que no se vio afectado por los bombardeos de la II Guerra Mundial.
Se puede entrar con la Nuremberg card. Te dan una audioguía en la que Agnes, la esposa del pintor te cuenta su historia.
Por cierto, no te vayas de la plaza sin ver la gran escultura de la liebre que repesenta una de las obras de Durero.
12. VISITA EL PALACIO DE JUSTICIA
Este lugar ganó importancia después de la Segunda Guerra Mundial como el sitio donde se llevaron a cabo los Juicios de Núremberg contra los líderes nazis que habían sobrevivido a la Segunda Guerra Mundial.
Se decidió que se celebraran en Núremberg porque se considera que aquí surgió el Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán, conocido popularmente cono el Partido Nazi y, a modo de venganza o compensación por tantas vidas, aquí se le puso fin.
El Palacio de Justicia alberga una exposición sobre estos eventos históricos.
13. VISITA EL MERCADO DE NAVIDAD
Si vas en el mes de diciembre, aprovecha para vistar el Christkindlesmarkt, uno de los mercados navideños más famosos del mundo. Ofrece productos tradicionales, delicias culinarias como las tradicionales salchichas y glühwein (vino caliente especiado), dentro de una atmósfera festiva.
En 2023 se inaugura en 1 de diciembre y estará abierto hasta el 24. La encargada de la inauguración será el tradicional ángel navideño representado por una chica que dará el pregón de inauguración y se paseará por el mercado.
14. DISFRUTA DE SU GASTRONOMÍA
Sin duda alguna, no te puedes ir de la ciudad sin probar sus Lebkuchen (galletas de jengibre), las salchichas pequeñas asadas o el Schäufele (codillo) asado, acompañados de la típica Rotbier o cerveza roja.
SALCHICHAS
Las Wratbursten de Núremberg son unas salchichas pequeñas, aproximadamente del tamaño de un dedo.
Son un producto con denominación de origen, por lo que siempre tienen que estar elaboradas dentro de los límites de esta ciudad y siguiendo la receta tradicional.
Se hacen a la brasa y cada plato suele incluir 6 salchichillas con mostaza. Como acompañamiento puedes elegir entre ensalada de patata o chucrut.
El lugar más típico para comerlas porque las siguen haciendo con leña es el Bratwurst Röslein. Está justo en frente del ayuntamiento. Nosotros las probamos en el Wirtshaus Hütt’n muy cerca de la casa de Durero que está muy bien de precio.
Una opción más barata es cogerlas bien en el Bratwurst Röslein, bien en otro restaurante o puesto callejero con pan por unos 4 euros.
CODILLO ASADO
Otra comida muy típica es el Schäufele asado. El codillo de cerdo es la comida típica de Alemania. En esta región, se prepara el codillo entero, con hueso y piel. Solo está cocinado de manera correcta si la peil está muy crujiente. Se sirve acompañado de unas bolas de patata y una deliciosa salsa.
POSTRES
Como postre, debes probar, al igual que en cualquier parte de Alemania, el Apfelstrudel (una tarta de manzana) y además, en Núremberg, las típicas Lebkuchen, una especie de galleta con la textura de un bizcocho, conocido como pan de especias.
Su origen se remonta a los monjes franconios, en el siglo XIV. En su composición lleva frutos secos, miel, harina, huevos y especias, entre las que es fácil distinguir la canela, el anís, el clavo o el jengibre. Estas galletas se pueden comprar en bonitas cajas para regalo o en paquetitos (en el supermercado estaban a partir de 9 euros).
¿DÓNDE COMER EN NÚREMBERG?
Nuestra recomendación es el Wirtshaus Hütt’n. Probamos el plato de las salchichas de Núremberg (unos 9 euros), el que combina 4 de Núremberg y 2 más grandes típicas de la región de Franconia, la ensalada de pavo que viene con 3 trozos enormes de pechuga y es muy abundante y el la parrillada de 3 carnes (cerdo, ternera y pavo) que es muy parecido a la ensalada, sólo que además lleva patatas asadas.
Esto lo comimos en 2 días porque nos gustó tanto que volvimos. Los postres de manzana y chocolate también son abundantes. Ambos llevan 2 bolas de helado de vainilla y nata montada. Además, tanto la cerveza rubia como la roja (típica de allí) están buenísimas.
15. VIAJA A LA EDAD MEDIA EN HANDWERKERHOF
En una esquina del casco antiguo, muy cerca de la puerta que va a la estación de tren, se encuentra el Handwerkerhof o “rincón de los artesanos”, un recinto en el que se han reconstruido las tradicionales viviendas de la Edad Media.
Hoy en día estas casitas son tiendas de artesanía y restaurantes. Un pintoresco lugar que todo aquel que visite Núremberg, debe ver.
16. IGLESIA SAN LORENZO
La Lorenzkirche es una iglesia gótica que se puede ver desde lejos. En la fachada oeste se ve la «estrella de San Lorenzo», un rosetón de piedra recibe al visitante. En su interior se encuentra uno de los órganos más grandes del mundo.
Tiene dos torres, una de ella es más alta que la otra, por eso el constructor de la segunda torre quiso que la suya fuese la más bonita.
Al lado de la iglesia se pueden una serie de enormes baldosas del tamaño de las que hay en la Grosse Strasse de la que os hablamos más abajo.
17. FOTOGRAFIAR EL HOSPITAL DEL ESPÍRITU SANTO
El Hospital del Espíritu Santo (Heilig-Geist-Spital) es un antiguo hospital medieval que ahora funciona como residencia de ancianos y un restaurante, pero conserva su encanto histórico.
Si tienes la oprtunidad de entrar, no te pierdas la bellísima sala de reuniones.
Este es uno de los lugares más fotografiados de la ciudad. Las mejores perspectivas de obtienen desde el puente de los museos o Museumsbrücke.
Y si te gusta la apicultura, fíjate en las colmenas que hay justo al lado del edifico, muy cerca del río.
18. APRENDER DEL PASADO
En 1934, el arquitecto de Hitler, Albert Speer, comenzó a elaborar un plan arquitectónico para concentrar la sede del partido nazi, con una superficie de unos 11 km² y una serie de edificios, inspirados en la antigua Grecia y Roma, pero sin colores llamativos ni elementos decorativos.
Esta «monumentalidad» pretendía «intimidar y fascinar», así como «demostrar la superioridad de la ideología nazi», según el historiador Wolfgang Benz.
La guerra impidió la finalización de las enormes instalaciones, como el Palacio de Congresos, el Estadio Luitpoldarena y Märzfeld, que debían servir como sedes centrales para los mítines del Partido Nacionalsocialista.
El Palacio de Congresos
El edificio monumental más grande que se conserva, inspirado en el Coliseo de Roma, es el Palacio de Congresos.
Este edificio fue la sede del centro de documentación del campo de concentración del partido nazi, que puede servir como punto de partida para explorar las huellas arquitectónicas que el sistema totalitario dejó en Núremberg.
Hoy en día alberga el Centro de Documentación del Partido Nazi (Dokumentationszentrum Reichsparteitagsgelände) en el que se documenta la historia del Partido Nazi en Núremberg y su papel en la planificación de los eventos del Partido Nazi.
Desde allí se puede llegar fácilmente al Zeppelinfield y al Luitpoldarena y a la Große Straße, prevista como una calle peatonal para los desfiles nazis de 2 kilómetros de longitud, aunque sólo llegó a tener 1,5 km.
El Campo Zeppelin o Zeppelinfield
La tribuna del campo Zeppelin, inspirada en el templo griego de Pérgamo, era el lugar elgido por Adolf Hitler para pronunciar sus discursos. Durante la postguerra, este espacio se destinó a eventos deportivos y conciertos de grupos como Bob Dylan, los Rolling Stones o Tina Turner.
Si quieres saber más sobre este tema, puedes:
- Visitar el Museo Nacional Alemán (Germanisches Nationalmuseum): Este museo es el mayor museo de cultura e historia alemana. Alberga una colección que abarca desde la Edad Media hasta la época contemporánea.
- Ir hasta el Monumento a los Derechos Civiles de los Judíos que conmemora a los judíos asesinados durante la era nazi y es un recordatorio importante de la historia sombría de la ciudad.
- Hacer este tour guiado sobre el Tercer Reich.
- Hacer este tour guiado al Campo Zeppelin.
Núremberg es una ciudad que combina la rica historia con una vibrante vida contemporánea. Su belleza arquitectónica y su importancia histórica la convierten en un destino fascinante para los visitantes.
¿QUÉ VER EN LOS ALREDEDORES DE NÚREMBERG?
Si vas a estar varios días en la zona, tienes un montón de opciones para elegir, que van desde:
- Múnich, la capital de Baviera que queda 1 hora en tren (2 en coche).
- Ratisbona, también a una hora en ambos medios de transporte.
- Bamberg a 30-40 minutos en tren (50-60 en coche)
- Rothenburg ob der Tauber, el famoso pueblo de Pinocho. Es un poco más complicado llegar en transporte público, pero una buena opción si vas en coche (1 hora), o también puedes esta Excursión guiada a Rotemburgo en tren con Civitatis.