Lucca es una preciosa ciudad de la Toscana italiana cercana a Pisa, por lo que es un destino ideal tanto si se visita ésta o Florencia.
Escondida entre imponentes murallas renacentistas, con calles empedradas y hermosas piazzas, es un lugar perfecto para recorrer a pie.
¿Qué ver en Lucca en un día?
1. LAS MURALLAS
Tanto si llegas en transporte público, como si vas en tu propio coche, lo mejor es dejarlo a las afueras y atravesar las monumentales murallas de la ciudad que la protegen desde los siglos XVI y XVII y que se conservan casi intactas.

Con 12 metros de altura y 4,2 km de longitud, poseen un sendero con con árboles desde el que se divisa el centro histórico y en el que, al igual que las murallas romanas de Lugo, cada día acuden los locales a pasear o a correr.
2. LA PIAZZA NAPOLEONE
Una de las primeras plazas que nos encontramos fue la monumental Piazza Napoleone, conocida como la Plaza Grande por sus dimensiones.
Construida en 1806 por orden de Elisa Baciocchi, princesa de Lucca, y dedicada a su hermano, el emperador Napoleón, esta plaza se amplió arrasando todos los edificios medievales circundantes (incluida una iglesia), para dar una mayor relevancia al imponente Palacio Ducal y convertirlo en el centro del poder político de la ciudad de Lucca.

En el centro de la Plaza se encuentra la estatua a tamaño real de María Luisa de Borbón, duquesa de Lucca durante los nueve años anteriores a su muerte y que reemplazó la de Napoleón, tras la caída de su imperio.
3. EL PALACIO DUCAL
El edificio histórico más importante de la plaza de Napoleón es el imponente Palacio Ducal, antigua residencia de Elisa Baciocchi y, durante más de 800 años, centro del poder político y administrativo de la ciudad de Lucca.
Construido sobre las ruinas de una antigua fortaleza, el Palacio Ducal ocupa uno de los laterales de la plaza y tiene una elegante fachada con dos portales monumentales que llevan a patios interiores, conectados por una galería neoclásica.
Una vez dentro, puedes admirar la magnífica escalera real que conduce al Patio de Armas, el Salón del Trono, el Salón del Bosque, la Galería de las Estatuas y los Apartamentos Reales, además del Museo del Resurgimiento.
4. LA IGLESIA DE SAN MICHELE
Un poco más adelante, se encuentra la imponente Iglesia de San Michele, una de las iglesias más bonitas de Lucca, ubicada en la histórica Piazza San Michele.

Construida sobre el antiguo foro romano, centro del poder de la ciudad, este templo románico pisano del siglo XI, maravilla por su fachada de mármol con sus arcos ciegos, sus detalles y figuras, y sus 4 galerías de la parte superior coronadas con una estatua del arcángel Miguel, de 4 metros de altura.
5. LA CASA DE PUCCINI
Saliendo de la plaza por Via di Poggio te encontrarás en pocos minutos con la estatua del gran compositor Giacomo Puccini, nacido en Lucca en el año 1858, delante la fachada de su casa natal.
En su interior puedes ver objetos personales y recordar sus óperas más célebres como La bohème, Tosca, Madama Butterfly y Turandot con su increíble aria final Nessun dorma.
6. TORRE DELLE ORE
Cerca de la iglesia San Michele se encuentra la torre delle Ore, que con sus 50 metros es la torre más alta que ver en Lucca. Es conocida también como Torre de la lucha, ya que fue disputada entre dos familias: los Quartigiani y los Diversi.
Para disfrutar de sus bonitas vistas del casco antiguo de Lucca, hay que subir 207 escalones, eso sí, durante la visita también se puede ver el mecanismo del reloj del siglo XVIII, que sigue funcionando en la actualidad. Aunque este no es el reloj original, ya que el primero se instaló a finales del siglo XIV.
Una cosas muy peculiar de esta torre es que su reloj da las campanadas al estilo romano, es decir, consideran que el día tiene 4 partes de 6 horas cada una; así que cada hora da una campanada a la una, dos a las dos, tres a las tres, cuatro a las cuatro, cinco a las cinco, seis a las seis y luego vuelve a empezar el ciclo.
Como todo lugar mágico, esta torre tiene una leyenda según la cual, el campanario de Lucca está habitado por el fantasma de Lucida Mansi, una luquense que vendió su alma al diablo a cambio de conservarse joven y bella durante tres décadas.
El diablo cumplió su palabra,pero cuando se completó ese tiempo, volvió para cobrar su deuda.
Entonces, Lucida subió a la torre para intentar detener el tiempo, pero el diablo la atrapó y le arrebató su alma, que sigue vagando por este lugar.
7. EL PALACIO PFANNER
Este palacio privado del s. XVII fue escenario de la película Retrato de una dama, protagonizada por Nicole Kidman y John Malkovich.
Destaca su jardín con un estanque ornamental y sus cítricos entre esculturas de dioses griegos.
Aquí vivió Félix Pfanner, de origen austríaco, que llevó la cerveza a Italia y la fabricó en esta misma mansión.
Actualmente, además de ser la residencia de la familia Pfanner, es un museo e incluso un alojamiento ya que tienen algunos apartamentos en el interior del palacio que se pueden alquilar.
8. BASÍLICA DE SAN FREDIANO
La basílica di San Frediano es una de las iglesias más antiguas de la ciudad, conocida por su impresionante mosaico dorado en la fachada.
Fue construida en el siglo VI por San Frediano, obispo de Lucca, sobre los restos de una iglesia anterior dedicada a San Vicente.
Pero en el siglo XII, la iglesia fue completamente renovada en estilo románico y adquirió su aspecto actual.
9. PLAZA DEL ANFITEATRO, LA PLAZA MÁS CURIOSA DE LUCCA
Sin duda alguna, la plaza más bonita y curiosa de Lucca, es su Piazza dell’ Anfiteatro.
Esta plaza ovalada sigue el trazado original del antiguo anfiteatro romano, construido en el siglo I o II d.C. y podía albergar hasta 10.000 espectadores.

A lo largo de los siglos, la estructura se fue desmoronando y sus materiales fueron reutilizados para otras construcciones a lo largo de la Edad Media.
En el siglo XIX, el arquitecto Lorenzo Nottolini rediseñó el área y transformó el espacio en una plaza pública, respetando la forma ovalada original del anfiteatro.
La entrada a la plaza se realiza a través de cuatro arcos, que coinciden con las antiguas puertas del anfiteatro. Está rodeada de casas en tonos pasteles y en ella hay varios restaurantes y cafeterías.
10. TORRE GUINIGI, LAS MEJORES VISTAS DE LUCCA
Si hay un lugar que no te puedes perder en Lucca, a parte de su Plaza del Anfiteatro, es la Torre Guinigi.
De las aproximadamente 130 torres medievales que tenía la ciudad, es la única, junto con la cercana Torre delle Ore, que ha permanecido intacta, mientras que todas las demás fueron «cortadas» o demolidas durante el siglo XVI.
Desde lo alto de esta torre medieval de ladrillo rojo obtendrás las mejores vistas de la ciudad en medio de un jardín. Sí, has leído bien, en lo alto de esta torre hay un pequeño jardín con encinas, que, según cuenta la leyenda, cuando murió el poderoso mandatario que da nombre a la torre, Paolo Guinigi, perdieron todas sus hojas.
Para llegar a la terraza hay que subir 25 tramos de escaleras y 230 escalones, que aunque son bastantes, se hacen llevadreos porque hay varios tramos para descansar y como ya hemos dicho, la subida está totalmente compensada por las espectaculares vistas.
En un día claro, a la sombra de las grandes encinas se pueden admirar las vistas de las plazas e iglesias, los altos campanarios, los tejados rojos de las casas, las estrechas calles y todo el paisaje de verdes colinas y montañas, los Alpes Apuanos al noroeste, los Apeninos al noreste, el Monte Pisano al sur.
La entrada cuesta 8 euros; 6,50 si es reducida.
11. LA CATEDRAL
El duomo o catedral de Lucca, en su mayoría románico del s. XI, luce una espectacular fachada de estilo pisano.
En su interior, destaca el Volto Santo (Santa Faz), un sencillo cristo de piel oscura a tamaño natural clavado en una cruz de madera que según la leyenda, fue tallado por Nicodemo después de asistir a la crucifixión.
12. CALLES DEL CENTRO HISTÓRICO
Como ya hemos dicho, la mejor forma de conocer la ciudad es perdiéndose por sus calles y descubriendo sus numerosos rincones con encanto.
No te pierdas la estrecha Via Fillungo, una animada calle comercial repleta de comercios que cruza la ciudad de norte a sur siguiendo el trazado del Cardo de la antigua ciudad romano (es la calle de la Torre delle Ore).
En resumen, si visitas la ciudad de las 100 torres y las 100 iglesias, en la emblemática región de la Toscana, entre Pisa y Florencia, seguro que te no te arrepientes ya que Lucca enamora por su fantástico patrimonio histórico y artístico, concentrado en su casco antiguo medieval, reconocido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.