Los mallos de Riglos son una formación geológica única que consiste en enormes paredes verticales de piedra caliza y color rojizo debido a los materiales ferruginosos que contienen, que se acentúan al atardecer.
Los Mallos de Riglos se encuentran en el pueblo con el mismo nombre, en la comarca de la Hoya de Huesca en el Prepirineo Aragonés.
Estas enormes rocas son un referente para escaladores de todo el mundo ya que disponen de unas 200 vías de escalada.
Pero este Monumento Natural, es también un lugar ideal para senderistas como nosotros que recorrimos su sendero circular que da la vuelta a los mallos.
Origen de los Mallos de Riglos
Se originaron por la orogenia alpina, hace unos 65 millones de años, cuando se formaron los Pirineos.
Posteriormente el agua y el viento los han ido modelando, dando lugar a las actuales paredes rocosas gigantes que se reparten por la cara sur de las sierras exteriores del Prepirineo.
Cada uno de los mallos de Riglos tiene su propio nombre. Los más conocidos e impresionantes son el de Pisón (el mayor de todos ellos) y el de Firé.
Pero también admirables Cuchillo, Agua, Frechín, Castilla, Volaos, Visera o Puro y el resto de mallos de menor tamaño que conforman este paisaje.
¿Sabías que…?
Los mallos de Riglos, situados a orillas del río Gállego y junto a la localidad del mismo nombre, son los más famosos, pero no los únicos.
En esta zona están también los mallos de Agüero, Vadiello, Murillo de Gállego y el Salto de Roldán, entre otros, que juntos forman el Monumento Natural de los Mallos de Riglos, Aguero y Peña Rueba.
¿QUÉ VER Y HACER EN LOS MALLOS DE RIGLOS?
Escalar
Como ya os hemos contado, cada año acuden a estas montañas escaladores de todo el mundo atraídos por sus numerosas vías de escalada, muchas de ellas de gran dificultad, pero desde las que se pueden obtener unas vistas fantásticas.
Dar la vuelta a los Mallos
También hay un montón de gente que hace rutas de senderismo en la zona.
Quizás, la más popular es la ruta circular que da la vuelta a los mallos y que parte del pueblo de Riglos y está perfectamente señalizada.
Aquí os dejamos el mapa de nuestra ruta en Wikiloc, pero no tiene pérdida y las vistas son espectaculares.
Visitar el pueblo de Riglos
El pueblo ofrece el maravilloso espectáculo de ver desde abajo las imponentes montañas de los Mallos, en él destaca la Iglesia de Nuestra Señora de Mallos muy cerca del mirador y varias fuentes.
Avistamiento de aves
Sobre la cimas redondeadas de los Mallos de Riglos vuelan constantemente buitres y otras aves rapaces.
La observación de aves es una actividad tan importante en la zona que, además de los mallos, y el Mirador se los Buitres, se ha creado el Centro de interpretación de aves carroñeras ARCAZ, que cuenta con mirador acristalado para observar aves y videocámaras.
Este centro de más de 700 m2, interpreta una de las colonias de buitres leonados más numerosas de Europa.
Visitar el castillo de Loarre
El Castillo de Loarre, considerado el castillo románico mejor conservado del mundo. Esta una joya arquitectónica del siglo XI atrae a turistas y apasionados de la historia de todas partes gracias a su estado impecable y su riqueza histórica.
Visitar la colegiata de Bolea
Esta colegiata dedicada a Santa María, es un hermoso ejemplo del gótico tardío. En ella, además de su impresionante edificicio con sus bóvedas y columnas, destaca el retablo mayor, considerado una obra maestra dentro de la pintura del primer renacimiento español.
¿Cómo llegar a los Mallos de Riglos?
La mejor forma es en coche por la carretera A-132 que comunica Huesca con Jaca. El desvío hacia Riglos está más o menos a medio camino, a unos 45 minutos en coche desde ambas localidades.